La brasileñas sustituyen masivamente las tangas por los bikinis y las mallas enteras
El 70% de las ventas de trajes de baño corresponde a medidas más grandes que las habituales en la década anterior, revela un informe de tendencias de la clientela.
Un estudio de 2010, mostraba ya que la legendaria “esbeltez” de los brasileños, estaba en franco retroceso, a expensas fundamentalmente del avance económico y la alimentación más “contundente” de los ciudadanos.
Para ese año, el 50% de los hombres y el 48% de las mujeres estaban obesos. La muestra no significó directamente una “mejor” alimentación, sino el triunfo de la “comida chatarra” de un estilo distinto al típico brasileño.
Papas fritas, carnes procesadas y gaseosas saturadas de azúcar parecen ser las responsables del engrosamiento de la “figura” brasileña, que tenía una dieta tradicional mucho más rica en fibras: arroz, feijoao y vegetales.
Nueva tendencia
Así las cosas, diseñadores cariocas crearon Lehona, una línea de mallas y bikinis de corte absolutamente moderno, con un precio equivalente a los 75 dólares de promedio (bastante caro para el mercado), dedicadas exlusivamente a mujeres “altas y/o rellenas”.
Las compras se dispararon desde que abrieron la línea, y, aunque la empresa prefiere la discreción al hablar de sus ventas, lo cierto es que están agotados varios modelos para esta temporada.
Aunque en el modelaje se mantiene la línea de tangas como algo tipicamente brasileño, las otras empresas diseñadoras están virando ahora su publicidad camino de preferencias menos exigentes a la hora de mostrar el cuerpo.
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