El primer ministro de Canadá continúa alzando la voz por la igualdad de género

Días pasados el primer ministro de Canadá, reconocido feminista participó de la 60 sesión de la Comisión sobre la Condición de la Mujer y volvió a alzar la voz en favor de la igualdad de género.

«Voy a seguir diciendo alto y claro que soy feminista hasta que me respondan encogiendo los hombros» dijo Trudeau quien se ha convertido en los últimos meses en un defensor internacional de los derechos de las mujeres que invita a la población del mundo a criar hijos y hijas feministas para lograr una igualdad y entiende que el feminismo no es que un género este por encima del otro.

Él explica que mientras siga llamando la atención que el se denomine feminista seguirá diciéndolo hasta que sea algo natural que la gente lo sea. «No debería ser algo que generase una reacción. Es simplemente decis: yo creo en la igualdad entre hombres y mujeres y creo que todavía tenemos mucho que hacer hasta llegar ahí. Eso es como decir que el cielo es azul y la hierba es verde».

Desde su llegada al poder Canadá ha emprendido una ruptura con el pasado más retrógrado del país y dio un giro para tener un Gobierno paritario.

Trudeau protagonizó una conversación pública junto a la directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka y recibió muchas veces la ovación de los presentes por sus palabras.

El primer ministro de 44 años explicó que los jóvenes ven la igualdad como algo mucho más natural hoy en día, y argumentó que si hoy muchos aplauden sus palabras es porque es uno de los primeros de su generación en llegar al poder pero es algo que piensan muchos hombres en el mundo.

«¿Debemos luchar por los derechos de la mujer y tratar de crear sociedades con más igualdad? Obvio. ¿Debemos respetar la diversidad y reaccionar ante el racismo? ¡Por favor!», dijo.

Medidas

Por su parte la directora ejecutiva de ONU Mujeres subrayó la necesidad de tomar medidas concretas e inmediatas en favor de la igualdad de género, que «no debe ser un viaje con final abierto».

En ese sentido recordó que Naciones Unidas ha incluido como uno de los objetivos de su agenda de desarrollo para los próximos quince años el terminar con la discriminación contra mujeres y niñas.

Sobre ese tema Trudeau dijo que su Gobierno está estudiando posibles acciones, entre ellas algunas para facilitar la vida laboral de las personas con niños pequeños -cuyo cuidado siguen asumiendo más las mujeres-, empezando por el Parlamento nacional.

Mientras que también defendió la idea de establecer una baja de paternidad en la que sea el hombre quien deba quedarse en casa durante unas semanas, en lugar de transferir ese permiso a la madre.

En relación al trabajo y la presencia de mujeres en altos puestos empresariales el primer ministro defendió la importancia de obligar a las empresas a dar cuenta públicamente de su equilibrio de género, ya que cree que eso incentiva «un comportamiento positivo».