Empresarios uruguayos negaron todo delito

Empresarios uruguayos dedicados al negocio de la chatarra que habían sido demandados por supuesta estafa contra un ciudadano español, negaron todo delito y aseguraron que pusieron todos los elementos de prueba al alcance de la Justicia para demostrar que actuaron legalmente.

Señalaron que comenzaron gestiones para instalar en el Puerto de Montevideo un desguazadero modelo de barcos con la intención de poder exportar el producto a diversos países.

«Es así que contactamos con un aparente comprador interesado, un empresario español que dijo tener una importante empresa del ramo. Luego de firmar el contrato se trasladó a Uruguay y tomó contacto con nosotros y nos acompañó incluso en las gestiones para el acuerdo de la planta. Conforme al contrato debió hacer una entrega de U$S 75.000 a cuenta de compra de chatarra naval», señalaron.

Explicaron que «debido a los diversos trámites ante las reparticiones estatales para lograr la aprobación de la planta de desguace, la relación comercial se fue deteriorando por ambas partes, al punto que se ofreció al comprador la devolución de la suma adelantada, cosa que rechazó».

Indicaron que comenzaron entonces los trámites judiciales para deshacer el negocio, devolver el dinero recibido y recuperar los derechos sobre dos barcos que habrían sido entregados a la empresa española en concepto de adicional de garantía por el mencionado depósito, «habiéndose iniciado un expediente de oblación con fecha 4 de octubre».

Según señalaron los empresarios uruguayos, «en ese contexto el español presentó la denuncia de la que diera cuenta la prensa». Aseguraron que la empresa uruguaya ha encargado a sus abogados que presenten las denuncias penales correspondientes.