Tabaré: Fue la transición de la derecha para la izquierda…¿será ahora, de la izquierda para la derecha?

El FA, no ganaba ni la Intendencia de la Capital, pues todos conocían a los candidatos municipales y presidenciales de la época (viejos lobos de mar). Hasta que apareció Tabaré Vazquez. Y en seis meses, su carisma, juventud y buena pinta, llamaron la atención del electorado. Pronto se supo quién era y qué había hecho en La teja y en el Club Progreso. Tal vez por «desconocido»; bonachón y buena persona, logró que la fuerza política de Izquierdas, ganara la Capital, y más tarde, el gobierno nacional.

Sumado a esto (claro está) las pésimas políticas de los partidos tradicionales – principalmente el gobierno de Jorge Batlle – hubo un voto castigo-desahuciado-embroncado que llevó al FA al poder, hasta nuestros días.

Hoy es otro gallo el que canta. Uruguay está siendo admirado desde afuera, por idealistas de derechas e izquierdas…¿por qué?. La respuesta es tan obvia, que ni vale la pena repetirla aquí.

Todo está mejor que antes, o por lo menos, menos peor.

El próximo candidato no-FA, será anti-izquierdista, pero mantendrá un discurso dizfrazado de socialista, e intentará simpatizar con el Presidente Tabaré Vazquez (¡claro que va a ganar!), haciendo una oposición blanda, de «gobernabilidad» y pacífica convivencia política…pero será de la derecha. Ya nos tienen acostumbrados a sus «moñas» estratégicas, para ganar elecciones.

Hay un hombre, que milita desde siempre en el Frente Amplio. También es joven, bonachón y muy buena persona. Ha demostrado ser muy eficiente en el cargo que le colgaron a la espalda, y que lo ha cargado por varios años. No es otro más, que Raúl Sendic.

Las fuerzas políticas que se auto-cataloguen de SOCIALISTAS, en el real sentido de la palabra, deberían prestarle más atención a este joven político, y comenzar a escuchar todo tipo de opinones entre sus militantes y simpatizantes, para, de esa forma crear las condiciones que logren disolver el estigma de su apellido paterno. Al final, no es solo de izquierdistas que se nutre el electorado frente-amplista.