¿La Justicia es justa?

¿Cómo se siente el ciudadano consumidor cuando no tiene respuesta a sus demandas?

Hace tiempo luchamos con un Poder Judicial ineficiente. Se puede decir que hay falta de fondos, lo que no justifica sentencias que sistemáticamente ignoran una ley (Relaciones de Consumo) que tienen que aplicar y no lo hacen.

Prueba de ello es el libro «Cinco años de Jurisprudencia sobre Relaciones de Consumo. Ley 17250″, publicado en convenio entre la Suprema Corte de Justicia, Dirección General de Comercio y Programa BID-Fomin.

La Suprema Corte solicitó de acuerdo con dicho convenio, que se enviaran todas las sentencias dictadas por las sedes en aplicación de la Ley 17250 hasta el año 2003.

Allí se incluyen 85 sentencias. Llama poderosamente la atención que no figuren los nombres de los jueces que actuaron, porque ellos aplicaron la norma.

Las demás sedes incumplieron la solicitud de la Suprema Corte o no aplicaron la ley de Relaciones de Consumo porque en miles de casos presentados (contratos) que están fuera de la Ley 17250, no puede haber solamente 85 sentencias aplicando la norma.

Hace ya tiempo que la mayor parte de las contrataciones (de lo que sea) son relaciones de consumo.

Un ejemplo: un usuario de un Banco concurre al mismo para sacar su dinero y ponerlo en otro. Temía que el Banco donde tenía su depósito fuera liquidado. El gerente interventor (Bco. Central) le contesta que se quede tranquilo que no va a tener ningún problema y lo convence de que todo está bien. El Banco fue liquidado y el usuario se quedó sin su dinero.

«El interventor» incumplió con la Ley 17250 que dice que la información debe ser «clara, veraz, suficiente y en idioma español». Ante esto el tribunal le da la razón al Banco, desestimando la demanda, que solicitaba la restitución del dinero. En ningún momento se mencionó la Ley de Relaciones de Consumo.

Un consumidor informado es un consumidor «libre» porque tiene el poder de elegir.

Cuando quienes tienen el poder de «decidir», sobre asuntos que tienen que ver con la justicia, y no dan las respuestas aplicando una norma, que ya tiene seis años de aprobada y debía ser conocida «por todos los ciudadanos-consumidores del país» y no se conoce o no se aplica, por quienes tienen que administrar justicia… ¿qué puede hacer la gente que no sabe y por ello fue abusada?

Las cúpulas de lo que sean, deben meditar y comenzar a ponerse en «el lugar del otro» aplicando todas las leyes que estén a su alcance. Para algo fueron aprobadas.

Nosotros seguiremos en la búsqueda de la justicia y hablando de lo que creemos está mal, como una crítica constructiva que ayude a mejorar las relaciones, la credibilidad y la esperanza, de tanta gente que hoy se siente desamparada. ¿Por qué será?

(*) Coordinadora de la Comisión de Responsabilidad Social de CUA 908.77.98