Científicos inventan nuevo plástico que puede ser reciclado infinitas veces

Desde 1909, cuando el químico Leo Baekeland desarrolló la baquelita, el primer plástico sintético de producción masiva, los científicos han desarrollado nuevos tipos de tienen todos una cantidad limitada de veces que pueden ser reciclados

Pero mientras que el petróleo crudo sigue siendo un componente clave, el plástico tiene demasiadas otras propiedades químicas complicadas para volver fácilmente a la tierra de donde vino. Échele la culpa a los aditivos: colorantes, rellenos y retardantes de inflamabilidad.

Pero los científicos del Lawrence Berkeley National Laboratory, en California, han desarrollado una nueva variedad de plástico que, según dicen, tiene todas las propiedades de los polímeros modernos, pero también es reciclable al 100%.

En un estudio publicado en abril en Nature Chemistry, el equipo describe un nuevo tipo de plástico que se puede descomponer a nivel molecular. Como resultado, ese plástico se puede recuperar completamente y convertirlo en nuevos elementos con las características estructurales del primer uso.

«La mayoría de los plásticos nunca se fabricaron para ser reciclados», señaló el autor principal Peter Christensen, científico del Molecular Foundry en el Berkeley Lab. «Pero hemos descubierto una nueva forma de ensamblar plásticos que tiene en cuenta el reciclaje desde una perspectiva molecular», agregó.

Cambiando el plástico para siempre

Los investigadores señalan que una gran razón por la cual el reciclaje a menudo se queda corto como solución es el uso de aditivos en los productos. El proceso de reciclaje a menudo se ve afectado por sustancias químicas que se adhieren a los monómeros, los pequeños compuestos que se fusionan para convertirse en polímeros. Como tal, es difícil limpiar esos polímeros en la planta de reciclaje. En última instancia, los plásticos con diferentes composiciones químicas se agrupan en la planta, lo que hace imposible predecir el aspecto final del producto reciclado.

Y el problema es que todas estas características hacen que los artículos plásticos no puedan hacer muchos viajes al centro de reciclaje antes de sus componentes se vuelvan prácticamente inútiles.

El nuevo material, que el equipo de Berkeley denomina polidiketoenamina o PDK, todo lo que se necesita es un baño de ácido para limpiar sus monómeros de todos esos aditivos pegajosos. A partir de ahí, esos monómeros básicos forman los bloques de construcción del próximo producto de plástico, ya sea una botella de agua, una percha o una cubeta. Debido a que el plástico se descompone en sus componentes más básicos y se reconstruye, no hay pérdida de calidad ni durabilidad.