Se fue Dante Iocco, lo llora el fútbol

Luego de algunos quebrantos de salud, Dante Iocco, ex presidente glorioso de Nacional falleció ayer a los 86 años. Nacido en Montevideo en 1923, Iocco, antes de ingresar en la faz deportiva fue un destacado deportista, eximio nadador lo que le valió integrar la delegación celeste y el equipo de waterpolo, que participó en los Juegos Olímpicos de Londres de 1948.

Sin dudas fue uno de los dirigentes más carismáticos e importantes que tuvo el fútbol uruguayo y obviamente la institución de sus amores, por la que hizo mucho más de lo que se conoce realmente. Dueño de una personalidad definida, un hombre querido por la gente nacionalófila, apreciado por sus pares y respetado incluyendo los dirigentes de su acérrimo rival, a los que siempre trató en un marco de respeto del que nunca se apartó.

Iocco presidió Nacional en dos ocasiones. En la primera para marcar una época gloriosa porque bajo su mando los tricolores obtuvieron la Copa Libertadores de 1980 y la Intercontinental de 1981. Llegó para remover la estructura interna de los albos; contrató a Juan Martín Mujica como técnico y a Esteban Gesto en la parte física, con quienes lograron en primera instancia la clasificación para intervenir en el máximo torneo continental ganándole a Peñarol por 2 a 0 el 4 de febrero de 1980.

Seis meses más tarde (el 6 de agosto) Nacional obtiene la segunda Copa Libertadores de América ante Internacional de Porto Alegre y posteriormente las Intercontinental -con gol del infalible Waldemar Victorino en la final al Nothingham Forest inglés, partido que se disputó el 11 de febrero de 1981- y Recopa. Ese mismo año Nacional obtiene además el Campeonato Uruguayo.

La segunda instancia en la que Iocco presidió Nacional fue de 1997 a 2001- período en el que logró cortar el sexenio carbonero jugándose como la primera vez a un técnico joven, con un corazón bolso por donde se lo mirara como Hugo de León acompañado nuevamente por el profesor Esteban Gesto en la parte física, dupla que ganó los campeonatos Uruguayos de 1998 y 2000.

Precisamente ese año realizó la venta de cinco jugadores por 10 millones de dólares a los efectos de solucionar los problemas económicos angustiantes de Nacional, por lo que la institución tuvo una bocanada importante de oxígeno. Y hay que recalcar que este dirigente contribuyó al crecimiento patrimonial con la compra de terrenos linderos al Complejo Deportivo «Los Céspedes».

Cuando la institución del Parque cumplió los históricos 100 años de vida, Iocco estaba en la presidencia, y todos recordarán aquella tarde del viernes 14 de mayo de 1999 en el Estadio Centenario, cuando Nacional celebró su aniversario enfrentando a PSV Eidhoven de Holanda, siendo Iocco el orador principal.

También tuvo una amplia trayectoria en la dirigencia del fútbol fuera de Nacional, siendo vicepresidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), cuando el ingeniero Héctor del Campo presidió el máximo organismo del fútbol uruguayo así como también fue miembro de la Confederación Sudamericana de Fútbol y de la Comisión Técnica de la FIFA.

Iocco dividió su vida entre Nacional y su profesión de rematador inmobiliario, profesión que ejercía desde 1949 y, además, es poseedor de una de colecciones de monedas antiguas más importantes del Uruguay siendo fundador del Instituto de Numismática. Ayer se fue un grande, ayer nos dejó terrenalmente un gran dirigente como Dante Iocco pero quedará en el espíritu y la memoria de todos, fundamentalmente de los nacionalófilos.