Defensor se trajo un gran triunfo de Buenos Aires pero no pudo clasificar

En su visita a Vélez, Defensor logró la victoria que había ido a buscar, con goles de Nicolás Olivera (a los 7), Diego Rodríguez (37) y Matías Britos (47), mientras que Federico Insúa (63, de penal) descontó para Vélez.

Sin embargo, el éxito no le alcanzó a la violeta  para seguir en carrera, porque el Grupo 7 se cerró con Vélez (12 puntos) como líder, seguido por el ecuatoriano Deportivo Quito (10), dueño del segundo pasaje a los octavos de final, en tanto que Defensor (9) y el mexicano Chivas de Guadalajara (4) quedaron al margen.

A la última fecha, Vélez ya llegaba relajado por el pasaje asegurado en el bolsillo, mientras que Defensor aspiraba aún a una última posibilidad, aunque no dependía de sí mismo, pues tenía que ganar y esperar que Chivas le arrebatara puntos a Deportivo Quito en el otro duelo.

Orgullo uruguayo

Desde el comienzo Defensor se mostró sólido y consistente, con un planteo punzante que encontró frutos rápidamente, pues antes de los diez minutos, Ferreira envió la pelota al área, Britos erró el remate y el balón le quedó servido a Olivera, que aprovechó la distracción de la defensa para vulnerar al arquero Montoya.

Con un buen trabajo en el mediocampo, Defensor conseguía ahogar a Vélez, al dejarlo sin la posesión de la pelota, además de presionarlo en la salida y generar varias ocasiones de riesgo.

Pasada la media hora, un pelotazo cruzado encontró en soledad a Britos sobre el sector derecho, que desbordó y envió el centro que no pudo empujar Ferreira, pero sí lo hizo Diego Rodríguez, que capitalizó la falta de marcas en la zaga local.

Sorprendido y golpeado, Vélez se quedó sin reacción, y encima, sufrió otro impacto certero en el comienzo de la segunda etapa, con un pelotazo de Alemán a Britos, que se fue por la izquierda a espaldas de los zagueros centrales y definió de zurda por encima de Montoya.

Con la radio prendida

A esta altura, todo Defensor ya era consciente de que la clasificación igualmente era una quimera, pues desde Ecuador llegaban noticias del cómodo triunfo de Deportivo Quito.

Con los ingresos de Federico Insúa y Jonathan Ramírez, Vélez mejoró y tuvo más movilidad en el ataque, y así comenzó a llegar con peligro, hasta alcanzar el descuento en un penal anotado por Insua por falta previa de Ferreira a Bíttolo.

Quedaba media hora, y en ese lapso Vélez creó varias ocasiones para reducir distancias, pero no lo suficiente para inquietar a un Defensor que ya había cumplido su parte durante la primera hora del partido, y que, aunque se acordó tarde de exhibir todas sus virtudes, se despidió de la Libertadores con la frente en alto. AFP