Final Sudamericana: La U de Chile pegó primero

La altura de Quito destruye piernas e intimida a gigantes. Ofrece un cóctel que mezcla juego sólido de un equipo que está en alza en esta nueva era y el calor que imprime la hinchada local en su Casa Blanca, que asfixia desde el inicio. Pero una noche apareció la Universidad de Chile y absorbió todo eso en 90 minutos e impuso un estilo que está maravillando a toda América. Orden defensivo, progreso ofensivo, toque y paciencia. Y apareció cuando la historia lo reclama.

Nacional sufrió el fútbol fantástico que ofrece el conjunto chileno en este mismo torneo. Ni siquiera pudo hacerle partido a un equipo que ofreció un recital en el Parque Central. Y así, con esa elegancia los chilenos se plantaron en la final y obtuvieron un triunfo justo porque funcionaron mejor durante la mayor parte del encuentro, ante un equipo local que se mostró impreciso en el toque de pelota, y con muy pocas opciones claras de gol. La U supo anestesiar ese efecto que siempre imprime Quito.

Desde el comienzo del partido, el cuadro chileno tocó mejor la pelota, tuvo flexibilidad en los movimientos en bloque para salir en forma ordenada a la zona contraria. El equipo ecuatoriano esperó hasta los 18 minutos para lanzar el primer disparo a puerta a través del argentino-ecuatoriano Claudio Bieler, pero encontró bien ubicado al portero Johnny Herrera. Bieler volvió a probar con un disparo que se fue por el costado derecho del arco visitante, al minuto 20. Herrera, golero del equipo chileno, tuvo una brillante acción para evitar el gol, ya que le ganó en un bravo mano a mano a Néicer Reasco.

Pero lo mejor llegó al final de la primera parte. Y la pimienta la puso la visita: Vargas se enchufó, apareció en el partido y convirtió, tras un pase preciso de Charles Aránguiz, se metió entre el defensa argentino-ecuatoriano Norberto Araujo y el portero Alexander Domínguez, se abrió al costado izquierdo y con toque suave y colocado decretó el primer gol del partido.

Luego, el juego se hizo de ida y vuelta. Emoción y adrenalina, es lo que sobró. Hubo acciones claras para los dos lados y la U de Chile se perdió el 2-0 varias veces de contragolpe, receta que tan bien le sale. Pero el score no se movió y la historia terminó 1-0 a favor de la visita que saca un triunfo magnífico para jugar más aliviado la revancha en casa, que será el próximo miércoles.

En base a EFE