El campeón regresó a casa

Suenan los Wachiturros en Los Céspedes. Alexis Rolín tiene la remera en la cabeza, sólo viste calzas blancas y baila al compás de la música. Se mueve con la misma elegancia que transita por el fondo, a su lado Boghossian deja escapar una carcajada y el resto mira de reojo el paso de su compañero.

El hogar de Nacional destila buena onda. El sol acompaña el tiempo de celebración y todo es risas, bromas y goce desde el domingo a las 19:00. El entrenamiento regenerativo con el Profe Marcelo Tulbovitz llevando la batuta ya terminó y el fuego estaba prendido desde temprano. El olor a asado invitó y el plantel disfruta de un mediodía diferente. Después de tanto remar y luchar contra la corriente, un asado en comunión es lo mínimo que merecía este plantel, que tendrá -a partir del viernes- licencia hasta el 5 de enero, día que partirán rumbo a Colonia para llevar adelante la pretemporada de cara al último semestre de la temporada 2011-2012.

Después del movimiento matutino y antes de ese asado que reunió al plantel, Marcelo Gallardo habló en conferencia. El entrenador lleva el bajo perfil como bandera. Suele hablar solamente en Los Céspedes y en conferencia. «Me gusta hablar lo justo y necesario», comentó al respecto sobre el epílogo del encuentro con los periodistas. Lo dijo en un tono que sonó molesto. También remarcó que su mesura tiene que ver con lo expuesto que está al ser el técnico de «uno de los clubes más grandes de Sudamérica».

«Contento porque sinceramente si uno tiene que soñar un año como el que se me dio, en lo personal, ya que festejar un campeonato como jugador a mediado de año y rápidamente tener la posibilidad de festejar otro titulo como entrenador no se da todos los días», comenzó diciendo el Muñeco, quien enseguida se detuvo en agradecimientos: «Agradecer a las personas que confiaron en este proyecto, que confiaron en este cuerpo técnico. Agradecer a los jugadores, sin ellos, que son lo más importante, no se podría lograr nada si no se comprometían con la idea y con el proyecto. Fue un grupo muy bueno que respondió con la expectativas y también en los momentos más complicados se sobrepuso a diferentes circunstancias y las sacó adelante», destacó.

El coach tricolor confesó que «no me gusta hablar de mi» y que lo que se obtuvo «se basa todo en un conjunto; un conjunto de creer en que las cosas que se estaban haciendo eran las más correctas, que el tiempo muchas veces juega en contra y suele generar inestabilidad porque esto es futbol y se basa en resultados, hay que reconocer que hubo personas que estuvieron en todo el momento, como Alarcón y la gerencia deportiva», reconoció el ex futbolista.

Finalmente, otro de los temas que trató fue sobre el respaldo que él les ofreció a sus jugadores en momentos delicados. Por ejemplo, cuando le quisieron traer nuevos jugadores durante el torneo: «Me pareció lo menos que yo podía ofrecer: el respaldo. El respaldo hacia algo que yo había creído a principio de temporada y no merecía ser cambiado o juzgado por cinco partidos. Hay que siempre creer en lo que uno piensa y en los valores que, más allá de lo deportivo, los valores humanos son los más importantes.  Ellos me respondieron como uno esperaba».

 

Refuerzos

El rubro incorporaciones solo tiene rumores en Nacional. Aún no hay nada concreto más allá del posible regreso de Diego y Andrés Scotti. Ambos terminan su contrato a fin de años y sueñan con la idea de volver a club de sus amores. Los nombres de Vicente Sánchez –ex jugador albo- y de Rodrigo López suenan con fuerza, pero las altas comenzarán a tomar cuerpo y forma cuando el entrenador mantenga una cumbre con Daniel Enríquez.