Juana volvió a conmover el Salón de los Pasos Perdidos

El evento comenzó con la ejecución del Himno Nacional por parte de la Orquesta Sinfónica del Sodre, que estuvo acompañada por el coro de la citada institución y por los asistentes.

El primer orador fue Roque Arregui, presidente de la Cámara de Diputados, quien destacó la importancia de la fecha que se recordaba, puesto que demostraba que la poetisa compatriota había logrado trascender los límites de nuestro país.

Además informó que la diputada Beatriz Argimón tuvo la iniciativa de editar un libro a modo de tributo, que finalmente fue realizado por Jorge Arbeleche junto a Andrés Echevarría, y agradeció el apoyo de Agadu.

Por su parte, Alexis Buenseñor, presidente de Agadu, resaltó que la octogenaria institución que preside tuvo a De Ibarbourou como socia número 1585.

El dirigente puso énfasis en la importancia de honrar la memoria de nuestros grandes artistas y en continuar su siembra, ya que con esto se aporta al desarrollo del país. Para lo anterior, postuló la necesidad de la creación de un consejo nacional de artes y cultura, con rango ministerial.

Al terminar su alocución, Buenseñor afirmó que «honrar a Juana es honrar a todos nuestros autores».

La diputada Beatriz Argimón describió la ceremonia como una fiesta y evocó el momento en que Socorro Villegas, ahijada de la poetisa que estuvo presente ayer, le entregó a la escritora un ramo de violetas, su flor favorita, en el acto realizado en 1929.

Asimismo, la diputada invitó a los presentes a escuchar la voz de Juana en una grabación en la que describía sus emociones al momento de ser proclamada «de América». El público oyó con interés el fragmento en el que la poetisa catalogaba aquel día como un sueño en el que todas las violetas de Montevideo le pertenecieron, en alusión a los adornos florales que se colocaron en el Salón de los Pasos Perdidos.

Luego Argimón expresó que Juana luchó por los derechos de las mujeres y estaba cargada de sueños, muchos de los cuales realizó a lo largo de su intensa vida.

Tras estas palabras llegó el turno de Edith Moraes, directora del Consejo de Educación Primaria, quien aseguró que la palabra de Juana ha llenado cuadernos, libros y pizarrones con su color y sonido.

Para la maestra, gracias a Juana miles de niños compatriotas han aprendido a lo largo de varias generaciones qué es el lenguaje figurado. «Juana no está pero nos dejó su palabra», concluyó.

Los últimos oradores fueron Jorge Arbeleche y Andrés Echevarría, quienes presentaron su libro «Rapsodia de Juana de Ibarbourou», en el que se compilan poesías, narraciones y discursos de la autora.

Arbeleche enfatizó la escritura sencilla pero profunda de la escritora y aclaró que, si bien fue reconocida por su poesía, su obra es múltiple. Echevarría hizo hincapié en que el arte de Juana está en contacto con lo más íntimo del ser uruguayo y que la autora es una de las figuras más importantes de nuestro país.

Tras las alocuciones, el acto se cerró con un breve show en el cual la palabra de Juana se hizo voz en las actuaciones de Vera Sienra y Estela Medina, en los coros de las escuelas números 3 de Melo, 226 de Las Piedras y 102 de Montevideo, y en el Coro Departamental de Educación Primaria.