Hasta 60 uruguayos viven e investigan en el Continente Blanco a más de 50 grados bajo cero

La dotación de uruguayos que está actualmente en la Base Científica Antártica Artigas, ultima los detalles para recibir a la nueva misión que en el mes de diciembre los relevará. Este episodio sucede anualmente, cuando se produce el recambio, tanto del personal militar, como el científico.

Desde aquel lugar, el jefe de la Base, teniente coronel (Ejército) Longino Sosa, habló con LA REPÚBLICA, dando cuenta de los cometidos que se realizan, los estudios que se vienen desarrollando y cómo es la vida diaria de la dotación.

Según Sosa, la Base Científica Antártica Artigas, comprende una dotación permanente o de invernada de ocho integrantes, que cumple un año de presencia en la Base. La misma está integrada por el jefe de Base, un electricista, un mecánico, un cocinero, un buzo-lanchero, un médico, un observador meteorológico y un radiooperador. Longino Sosa, el mecánico y el cocinero se encuentran desde diciembre pasado y completarán un año. Los otros cargos son relevados aproximadamente entre 4 a 6 meses.

«En el verano se suman científicos de los diferentes proyectos de investigación y personal de mantenimiento llegando a tener una población de aproximadamente 60 personas», contó Sosa.

Sobre las investigaciones que han realizado los equipos de científicos en la Antártida, Longino Sosa manifestó que el único proyecto permanente es el Proyecto Científico de Meteorología, que brinda datos constantemente a nuestro país y a la Organización Mundial de Meteorología (OMM) en forma permanente las 24 horas del día los 365 días del año. «Existen 38 proyectos culminados y 13 en ejecución. Estos estudios se clasifican como proyectos del aire (ozono, relevamiento magnético, etc., proyectos del mar, estudio de las mareas, metodología marina móvil, proyectos de la tierra, glaciología, impacto del hombre en el medioambiente antártico, proyectos del hombre, incidencia del ambiente antártico en la flora bacteriana normal, en el film lacrimal, obtención del perfil psicológico del hombre antártico, y otros».

Para nuestro país, el descubrimiento más trascendental fue el realizado por el profesor y doctor Bartolomé Grillo, en cuanto a los ácidos grasos del grupo Omega 3 y su presencia en la Euphasia superba (Krill). Asimismo como su influencia al incluir dicho ácidos grasos en la dieta humana sobre patología aterogénica como la aterogenesis de las arterias aórtica y pulmonar».

En referencia a las temperaturas que han debido sufrir en el pasado invierno, el jerarca dijo, que se debieron soportar viento de más de 180 kilómetros por hora, casi semanalmente. Debido a este fenómeno hemos tenido sensaciones térmicas de más de 50 grados bajo cero».

«La sensación térmica más baja correspondió al mes julio, con 54º bajo el cero (-54º C) y una temperatura real de 27º bajo cero (-27º C). La Antártida es el continente con el promedio de humedad más bajo de la Tierra y el de temperatura promedio más baja. Las temperaturas son cambiantes en relación a las temporadas y a los meses que conforman las mismas, teniendo una media mensual en verano de 3º C y en invierno ­ 10º.

En razón a la temperatura, la misma eleva o disminuye la sensación térmica de acuerdo al viento reinante en cada jornada. Ha llovido. Eso nos llama muchísimo la atención, lo que provoca que la nieve se derrita en forma rápida. En diversos lagos que estaban congelados, con esta lluvia empiezan a asomarse ojos de agua. Se derriten los hielos, se provocan fisuras y grietas, lo que hace que se deba transitar con mayor precaución. Ha aumentado considerablemente la temperatura, como que ahora está sobre cero».

Para combatir estas temperaturas extremas, se cuenta con equipo especial.

«El frío es diferente. En los trabajos realizados en el exterior, las bajas temperaturas se combaten con equipos de frío, confeccionados especialmente para exteriores, guantes, gorros, antiparras y botas. Sentimos menos frío que en Uruguay Por otro lado, la base consta de un sistema de edificios prefabricados con tecnología neozelandesa, llamados «Wannigans» en honor a su creador, siendo altamente resistentes al frío y condiciones climáticas adversas. La temperatura interior es de 22, 24 grados. Andamos de manga corta».

Sosa señaló que actualmente en el continente Antártico, casi no hay noche. Porque está oscureciendo alrededor de la una y media de la noche. Hasta esa hora hay crepúsculo vespertino. A las tres de la madrugada, ya empezó el otro crepúsculo, el de la salida del Sol. Hay muy pocas horas de oscuridad, con la particularidad que el 21 de diciembre no hay noche.

 

«Acá no hay fronteras»

* «Existe una estrecha relación de cooperación, integración y amistad con las bases cercanas (Corea, Argentina, Rusia, Chile y China). Con el resto de las bases se mantiene un contacto radial (Brasil y Polonia). La Antártida no tiene frontera. Estrecha relación de amistad, actos protocolares, torneos deportivos, reuniones de camaradería. Una amistad muy linda y emocionante».

 

«Caravana por la Antártida»

* «Tenemos la suerte que acá, en la Base, vemos un canal de televisión que es el que trasmite el fútbol uruguayo. Nos tocó disfrutar del gran triunfo de la Copa América y ahora las Elimintorias. Cuando la Copa América, no podíamos ser menos, y nos fuimos en caravana. Tomamos nuestro vehículo; paseamos con nuestra bandera y algún tamboril por la base rusa, la chilena y otras. Recibimos la solidaridad de la base argentina, de la brasilera, felicitándonos por el título. Fueron momentos muy gratos».