Justicia investiga a 8 militares por denuncia de abuso sexual a soldado
Ocho militares del Ejército fueron trasladados ante la Justicia luego de una denuncia que presentó un soldado por haber sido víctima de abuso sexual, en un campamento en Soriano.
Un soldado del Ejército denunció que ocho militares lo obligaron a practicar sexo oral a otros efectivos como una “orden militar” y lo amenazaron de muerte, durante un campamento en el establecimiento El Mirador, en Mercedes, Soriano.
Ante la denuncia del soldado, el caso está siendo investigado por el Juzgado Letrado de Mercedes.
Los ocho militares presuntamente involucrados se encuentran detenidos, según informó este lunes el diario de Mercedes, Agesor.
La denuncia
Según el denunciante, el caso ocurrió entre la medianoche del viernes y la madrugada del sábado.
En su denuncia, que fuera publicada por el diario de Mercedes, el soldado aseguró que en la noche del viernes fue hostigado por varios efectivos que, luego de invitarlo a beber e intentar tocarlo, lo amenazaron para que les practicara “sexo oral”.
El efectivo relató que en momentos en los que se encontraba preparándose para una guardia, fue llamado por un grupo de militares que se encontraba en el casino del campamento.
“En ese lugar estas personas estaban tomando y me ofrecían de lo que estaban tomando que pude apreciar que era vino, negándome. En determinado momento el cabo me tocó la zona genital, corriéndome a un lado de inmediato, quise retirarme para cumplir la tarea asignada y para escapar de la situación ya que todos los presentes hacían bromas obscenas y se les notaba excitación, viendo que podían pasarse de la línea o la intención no era buena para conmigo, no pudiendo”, denunció el militar.
Asimismo aseguró que le dijeron: “Venga, siéntese y relájese, usted es muy serio y muy estructurado”, luego de que intentara escaparse de la situación.
“Me senté y me ofrecieron vino y cigarro. Tomé muy poquito y me insistieron que bebiera más, lo cual hice con cautela. Uno de ellos me dijo que le gustaría verme desnudo, atado, esposado y golpearme, preguntándome si me gustaba el sadomasoquismo”, dice en el relato de los hechos.
Ante la negativa, uno de ellos hizo levantar a todos para ir a pescar. Uno de los militares, que portaba una botella de whisky, le aseguró que se trataba de una “orden militar”, y que si no la cumplía le “partiría” la botella en la cabeza.
Más adelante, el efectivo relata: “Yendo hacia la orilla del río, y al llegar todos se pusieron en ronda para seguir bebiendo”.
“El cabo me puso en el medio, bajaron sus pantalones exigiéndome hacerles sexo oral. Negándome, el mismo cabo me hizo arrodillar ante un soldado petiso, gordito, amenazándome partirme la botella de whisky en mi cabeza. Le hice sexo oral a ese soldado, de golpe pude escaparme hacia los árboles del monte, en donde me encontraron, llevándome nuevamente hasta el río”, asegura el denunciante.
Pero los hechos no terminaron allí, según el relato del militar, porque volvieron a ponerse en ronda y le quitaron toda la ropa. El soldado “petiso y gordito” le amarró las piernas con un cinto, pero el acosado logró escapar.
Con posterioridad uno de los militares recibió una llamada telefónica. Fue entonces que dejaron ir al soldado, pero le aseguraron que si realizaba una denuncia, entonces lo matarían.
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