Empresas deberán captar un joven por cada jubilado que contraten
Así lo explicó a radio El Espectador el títular de la Cartera, Eduardo Brenta, quien reconoció la existencia de carencias de mano de obra especializada en determinadas áreas, “fenomeno que nos ha planteado el sector empresarial, una demanda por la posibilidad que jubilados puedan trabajar en sectores específicos”. La mayoría de los requerimientos ha provenido de las áreas vinculadas a la caja de Industria y Comercio.
Un jubilado, un aprendiz
El ministro planteó la necesidad de interpretar el plan que se propone el gobierno, no como la sustitución de trabajadores por jubilados, sino como la apertura de posibilidades a los que recíen entran al mercado laboral pero carecen de la experiencia, y la posibilidad de adquirirla.
En ese contexto, las empresas contratarán jubilados a la par que jóvenes –en igual número- con la idea que los egresados de instituciones de capacitación técnica-profesional, tengan la posibilidad de aprender cuestiones prácticas o inherentes a cada empresa en particular, junto a quienes se aprestan a retirarse de la vida activa.
Las empresas tendrán un plazo de doce meses para que el joven y el mayor trabajen en forma conjunta.
“Acá no buscamos resolver el problema de la falta de mano de obra hoy, sino que quien se está por retirar entregue conocimientos a quien ingresa”, explicó el ministro.
El jubilado reintegrado por su parte seguirá cobrando la jubilación, más el salario correspondiente a la categoría por la que ingresa, de medio oficial para arriba en tanto se entiende que es un docente en su materia.
Los jubilados no podrán ser más que el 10% del total de empleados de una misma compañía, la que no podrá estar enviando trabajadores al seguro de paro, mientras dure la permanencia de los pasivos “reactivados”.
Como plazo total el pasivo podrá estar dos años en la empresa, siempre y cuando no pase de los 70 años de edad.
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